Muy riguroso no será el estudio, pero parece ser que jugar al badminton corrige la miopía.
El estudio está echo por un laboratorio de oftalmología de rusia. Según dicho estudio no hay jugadores de badminton que sean miopes.
El estudio consistió en separar a veinte jóvenes en tres grupos. Los integrantes del primer grupo se sometieron a dos horas de entrenamiento tres o cuatro veces por semana. Al segundo grupo se le aplicó 10 sesiones de un tratamiento médico para corregir la miopía. El tercer grupo recibió una combinación de las dos técnicas.
Los resultados del estudio concluyeron que los del primer grupo, que se habían dedicado a la práctica del bádminton, mejoraron más de los síntomas que los del segundo grupo que se sometieron a un tratamiento médico.
Una de las explicaciones que se puede encontrar a este suceso lo da David Cabello, miembro del Comité de Desarrollo de la Federación Internacional. “En el bádminton se producen acciones muy altas y también muy bajas. La mirada, y con ella la cabeza, suben y bajan en numerosas ocasiones en poco tiempo. Esto provoca que haya más cambios de focalización y también un aumento del riego sanguíneo”.
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